domingo, 12 de septiembre de 2010

EL BELLO SERGIO (Le Beau Serge de Claude Chabrol , 1958)

Hoy nuestro blog está de luto. Andábamos convencidos de que Claude Chabrol era inmortal -su cine lo es-, pero la sacudida provocada por la noticia de su muerte nos ha devuelto a la cruda realidad. Creo que ya hemos manifestado nuestra preferencia por el cine de Chabrol, reconocemos, también, nuestro afán de coleccionista obsesivo, casi enfermizo, de sus películas. La pena es tremenda. Y egoísta: nos habíamos acostumbrado a ver sus películas de estreno en cada otoño, aquí en el festival de Sevilla, donde su obra acudía con cierta regularidad.

El homenaje que se merece no se puede limitar a una simple reseña. Aunque ya hemos comentado algunas de sus cintas (Una doble vida, Máscaras, El Infierno), a partir de ahora nos comprometemos a aumentar la frecuencia y hablar de sus filmes más a menudo, lo que sin duda es un placer para nosotros. Y creemos que lo mejor es comenzar por el principio: El Bello Sergio.



El primer largometraje de Claude Chabrol es un hito en la historia del cine. Esta película, sobre el regreso de un hombre enfermo a su pueblo natal, significa –para la mayoría- el arranque oficial de la Nouvelle Vague. El rodaje con escasos medios es todo un ejemplo para el resto de cineastas del movimiento. Chabrol utiliza la herencia que acaba de recibir su mujer y crea la compañía AJYM (siglas del nombre de su esposa, Agnes y el de sus hijos Jean-Yves y Matthieu). El resultado es una película muy simbólica (veremos que con exceso) y algo torpe en su realización, pero entusiasta y con mucho atractivo.

El aún rudimentario Chabrol se arma de toda su cinefilia para rodar con algunos encuadres barrocos a imagen y semejanza de Orson Welles. La osadía de sus planos se agradece hoy en día casi más que en el estreno. Los fallos en la trama y en el ritmo se perdonan por la singularidad de esta cinta con respecto al resto de su obra. Todavía no tenemos al Chabrol de El Carnicero, pero sí a un apasionado por el cine: en El Bello Sergio es director, guionista, productor y hasta actor. Las ganas de hacer cine destacan sobre todo lo demás.




Ese arrebato por fotografiar una historia, en parte autobiográfica, es la que le lleva a caer en un exceso metafórico. Francois (Jean-Claude Brialy) regresa a Sardent (el pueblo donde se rueda la película) para recuperarse de la tuberculosis que sufre desde hace tiempo. Allí se encuentra con sus amigos de la infancia: Serge (Gerard Blain) y Marie (Bernadette Lafont, mítica intérprete de Chabrol). Descubre que Serge se ha quedado atrapado en el pueblo desde que dejó embarazada a Yvonne (Michele Meritz). El matrimonio forzado y el nacimiento de un hijo deficiente, y su posterior muerte, no han hecho más que empeorar las cosas y provocar la caída en picado de Serge que se consume poco a poco en alcohol. La película se convierte en el Vía Crucis particular de Francois que se sacrifica, y pone en peligro su vida, para salvar a su amigo.

La parte final del filme es demasiado explícita: cruces en las ventanas, alambradas de espinas, apaleamiento del protagonista y conversaciones con el cura del pueblo (“¿te crees Jesucristo? Eres demasiado orgulloso” “Me da igual si lo soy o no, lo que importa es ayudar a Sergio”) se vuelven, paradójicamente, contra la Iglesia. Chabrol recuerda la raíz de la religión católica y la posición actual tan lejana del clero. De hecho, el director francés declaró que lo poco de cristiano que le quedaba se esfumó con esta película.

El Bello Sergio es una de las cintas que más queremos de Chabrol. Aunque sólo sea por lo que significó: el pistoletazo de salida a una extensa producción, de una enorme calidad. Hoy hemos querido recordar a Claude Chabrol. Hoy nuestro blog está de luto.


Ver Ficha de El Bello Sergio.

20 comentarios:

  1. La vi en televisión hace bastante, y no la recuerdo con nitidez -sí las impresiones del conjunto, que con tu reseña además han reverdecido-. En esencia diría lo mismo, imágenes y escenas muy bellas, quizá algo desdibujado el conjunto.

    ¡Qué tristeza, como dices, que ya no habrá más pelis de Chabrol! Por lo menos intentaré ir viendo las que me quedan, unas cuantas..

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  2. Alberto Q.
    http://traslaspuertas.wordpress.com

    Todos los blogs cinéfilos deberían estar de luto por lo de Chabrol.

    Gran homenaje, Ethan.

    Saludos

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  3. Triste noticia, me acabo de enterar esta noche cuando he llegado y he puesto el televisor. Chabrol deja una huella muy importante en la historia del Cine.
    La película que reseñas no la he visto, pero leído cuanto escribes, apetece.

    Un saludo.

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  4. Hola,
    Seguiré con atención tu homenaje a Chabrol y de paso a la Nouvelle Vage, de la que soy un ignorante y casi no he visto nada.
    Sugerentes tus comentarios sobre los errores y los aciertos del film, esta voluntad de hacer algo distinto con la cámara y el entusiasmo y atrevimeinto que compensan los errores.
    Cine entusiasta, cine de churrería, que es el mayoritario.
    Saludos.

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  5. No la he visto, Ethan. Ni muchas de Chabrol, que es un director de los de "a ver cuándo" en mi lista. Y aclaro que si me pongo ahora (que no lo haré, porque tengo muchas pelis en espera) no sería por su muerte, sino porque lo tengo en espera desde hace un par de añitos.
    Debería ponerme ahora aprovechando tus post, pero me da que no voy a tener tiempo.
    Hay películas que a pesar de haber envejecido en ciertas cosas, como dices, se mantienen más frescas que en su momento en otras.
    Un saludo.

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  6. No he visto esta película Ethan pero y tampoco conozco mucho el cine de Chabrol así que seguiré atentamente tu repaso a su cinematografía. Un saludo.

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  7. No sé por qué, muchos se han olvidado siempre de esta buena peli. Grande Chabrol.

    Te sigo ;) Muy buen blog.

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  8. Una gran perdida.
    Muy oportuno tu homenaje.

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  9. Todas las despedidas esconden zierta tristezza; la de Chabrol está zzercana al otoño y tiene un resquizzio de melancolía.

    Tal como dezzía este faszzinante direzztor, nos quedaremos sin ver sus estupendas tramas simples de personajes complicados. No habrá más asesinatos misteriosamente cotidianos, ni el monótomo gotear de un grifo, ni ciudadanos de provinzzias, ni casas burguesas en las afueras.

    Ya sabes, Ethan, que Chabrol era uno de mis direzztores favoritos. Lo era por muchas cosas, la más simple de todas ellas, es que disfrutaba mucho con su zzine, sin más argumentos por mi parte. Seguramente, el mejor y más misterioso de todos los argumentos. Algo zzercano al amor (o parezzido).

    De sus pelis me quedo con "La ceremonia", ya sabes, por las recortadas y ese tipo de cosas o por la Bisset, conduzziendo con guantes, cualquiera sabe.

    De sus frases, me quedo con aquella que dizze:

    "No existe una nueva ola, sólo existe el mar".

    Hasta siempre Mesieú Chabrol, besos para ustezz.

    Hasta luego, Ethan.

    Caperuzzita Roja

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  10. No la he visto, pero desde luego el triste momento merece la pena para ampliar la filmografía de Chabrol (de la que tengo lagunas injustificables)

    Me gusta eso de amar películas no sólo por lo que son, también por lo que significaron

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  11. Como decís, una tristeza enorme, una gran pérdida. Para nosotros significaba mucho su cine. Conocemos la campiña francesa y la vida en sus pueblos y en las pequeñas ciudades. Nos gustaba como Chabrol describía los personajes que allí vivían. Su forma personal de enfocar el cine negro, el drama o la comedia. Consiguió fabricar un estilo único, muy diferenciado del resto de cineastas. Pocos, muy pocos directores pueden presumir de lo mismo. Cine de autor, comercial a veces, independiente la mayoría. Como bien dice Caperuza (sé que estarás apenada) un cine de tramas simples con personajes complicados que ya no veremos más, aunque nos queda el consuelo de revisar una y otra vez sus viejas películas.
    Un abrazo y gracias a todos por vuestros comentarios.

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  12. Ethan, estupendo homenaje a Chabrol con tu comentario sobre su primera película.

    Por los comentarios que ha suscitado tu post, veo complacido que no está tan olvidado como creía y que somos muchos los que tenemos muy presente su cine.

    No estará de más revisarlo de vez en cuando.

    Un abrazo.

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  13. Bienvenido Scotty!
    Y sí, revisaremos, leeremos, nos empacharemos (como siempre) del cine de Chabrol, así seguirá presente.

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  14. Desgraciadamente no hace mucho acabé mi recorrido por el cine francés sin noticias de Chabrol así que gracias por presentarme su cine y este fin de semana me pongo con "La mujer infiel" aunque la tenga subtitulada.

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  15. ¡Vaya año 2010! Primero Rohmer y ahora Chabrol. Los abuelos de la Nouvelle Vague van desapareciendo dejando su cine, su legado eterno. Buen momento para regresar a la filmografía de este gran director.
    Saludos.

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  16. Vas a encontrarte verdaderas maravillas con el cine de Chabrol, Yuri.

    Es verdad, Licantropunk, este 2010 se ensaña con la nueva ola francesa. Lo de Chabrol lo llevamos peor.

    Saludos!

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  17. Qué buen cine nos deja este hombre.
    Descanse en paz.

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  18. Descanse en paz;; un trabajador nato: estuvo currando hasta hace pocos meses. Una obra enorme, en tamaño y calidad. Suerte que tenemos. Saludos, Raúl

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  19. No he visto ninguna de las últimas tres películas que tan bien has reseñado, pero como siempre, despiertas mi interés. Un abrazo

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  20. Nos gusta mucho hablar de cine, pero nuestra satisfacción es mayor si conseguimos despertar el interés de la gente. Muchas gracias por pasarte por aquí para decirlo, Elvira.
    Un abrazo.

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