lunes, 17 de septiembre de 2018

WHISKY A GO GO (Whisky Galore! de Alexander Mackendrick, 1949)

Célebre comedia de la Ealing, productora británica del legendario Michael Balcon. Las películas de la Ealing se distinguían por tramas donde personajes típicamente ingleses vivían situaciones que rayaban el surrealismo, pero a la vez se integraban perfectamente en la rutina cotidiana del resto de vecinos que no se alteraban lo más mínimo.


El sello de la Ealing era inconfundible, la producción de las películas era tan singular que todas las cintas parecían estar realizadas por la misma persona. Los principales directores que salieron de aquella fábrica de humor inglés fueron Charles Crichton, Henry Cornelius, Robert Hamer y, probablemente el mejor de todos ellos, Alexander Mackendrick.

Mackendrick había nacido en Boston, pero era hijo de escoceses y se crió y vivió en Escocia. Michael Balcon lo fichó a finales de los treinta para colaborar en los guiones y en el diseño de producción. En 1949, Mackendrick debutó con éxito como director en Whisky a gogó, película que se apoya en el carácter del pueblo llano escocés que tan bien conocía el cineasta desde su infancia. La tradición de los pescadores de esas tierras del norte y sus costumbres son muy bien retratadas en la cinta, con un tono realista caracterísitco del realizador.




En el filme un pueblo entero engaña al inspector de aduanas. El funcionario quiere confiscar el licor saqueado por sus vecinos en el naufragio de un barco. La historia se basa en un hecho real ocurrido durante la Segunda Guerra Mundial cuando en 1941 el SS “Politician” naufragó en las costas de las islas Hébridas con un cargamento de 24.000 cajas de whisky.

Mackendrick se distancia algo del sello impuesto por Balcon en los estudios Ealing, y en Whisky a go go logra que el espectador sienta lástima por el teórico villano de la película. Una ambigüedad narrativa que continuará en La bella Maggie (Maggie, 1954), donde toda Escocia se rie de un norteamericano que persigue a una barcaza por medio país; en El quinteto de la muerte (The Ladykillers, 1955), donde una anciana se enfrenta a un patético grupo de delincuentes; y en Viento en las velas (A High Wind in Jamaica, 1964), donde unos temibles piratas serán víctimas de los niños a los que secuestran.

Hace un par de años se realizó un remake de Whisky Galore!; ni que decir tiene que pasó sin pena ni gloria. Desde luego, sus secuencias nada tienen que ver con esta maravilla donde Mackendrick recoge la alegría escocesa regada con buen whisky:



18 comentarios:

  1. Que tal Ethan!
    La vi hace muchos años y la tenia algo olvidada pero al leer tu reseña me estaba acordando de algun detalle. Me encantan este tipo de peliculas que como bien dices tiene un sello mas que particular. Por un lado esa carteleria y posters, verdaderas joyas salidas de las manos de autenticos artistas. Estas producciones tenian una magia que las diferenciaba del resto, esos titulos de credito, ese blanco y negro... No se, a veces es casi como subirse a una maquina del tiempo...
    Siempre un placer visitar tu blog, feliz semana!

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    1. Producciones personales donde Michael Balcon tenía mucho que decir. De hecho, cuando Balcon se retiró, por culpa de la crisis que porvocó la televisión, ya nada volvió a ser lo mismo.

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  2. Recuerdo perfectamente "El quinteto de la muerte", una de esas películas que me gusta volver a ver de vez en cuando, con el gran Alec Guinness y compañía. Muy divertida.

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    1. Una película divertidísima, también con Peter Sellers que casi debutaba y Herbert Lom, Cecil Parker,... estaban casi todos los actores de la Ealing.

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  3. Conozco esta película pues soy un apasionado de las comedias de la Ealing. Entre mis preferidas: "Ocho sentencias de muerte", "Oro en barras" y "El hombre del traje blanco". Por cierto que también rodaron su visión de "Dunkerke" con John Mills, ésta no la he visto.
    Saludos!
    Borgo.

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    1. Muy buenas todas las que nombras. La de Dunkerque tampoco la he visto y mira que tengo ganas. "El hombre vestido de blanco" también la dirigió Mackendrick, sin duda el mejor activo de la Ealing.
      Saludos.
      Saludos.

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  4. Siento gran admiración por las películas de los estudios Ealing. Son encantadoras, especiales con cierto toque mágico. El año pasado visité esa pequeña mansión donde antaño se gestó tantas maravillas. Ahora vive una familia con el coche aparcado en la puerta y muchas macetas mustias. Cuando visité Cinecittà, allí no había nadie solo bandadas de cuervos que confirman la muerte del cine. En las verjas de la Paramound, cientos de turistas gordos en pantalón corto y chancletas se hacen selfies junto a sus hijos gordos y sus madres gordas.

    Ay, siempre he admirado el cine Alexander Mackendrick;subversivo, irónico y de refinado sentido del humor. Mackendrick, un director que se mantuvo al margen de la tradición liberal-humanista del cine británico, fue un gran creador infravalorado. Lástima. Las contradicciones del cine de Mackendrick se vieron presagiadas por su propia biografía. Aunque de padres escoceses y educado en Glasgow, nació en Boston. Las tensiones propias de una identidad cultural dividida. Los aspectos más duros y dolorosos de sus últimas películas de aventuras (rodadas en Estados Unidos) se vieron difuminadas por el sentimentalismo con que suele rodear películas de niños. Nunca he estado de acuerdo con todo esto, pero esto es otra historia, amigo Ethan.

    Si Whisky a go go tuvo éxito fue debido fundamentalmente a su pintoresquismo escocés. Mackendrick tuvo sumo cuidado de no hacer incurrir a sus rebeldes irlandeses en las mismas componendas políticas de la comunidad "cockney" protagonista de otras películas de los Estudios Ealing, Pasaporte para Pimlico, por ejemplo. Pero Mackendrick no se dejó tampoco encasillar en esta clase de comedias regionalistas, ya que, su película siguiente, El hombre vestido de blanco, satirizó a toda la sociedad industrial británica. En ella, el tejido milagroso de Alec Guinness simboliza la ilusión colisión entre el capital y el trabajo, antes de demostrar su poca consistencia y terminar hecho pedazos.

    Sí, bebamos Whisky a mogollón o a go go y brindemos por el triunfo de aquellas desgraciadas macetas, los cuervos de Cinecittà y los obesos delante de todos los estudios de la vieja fábrica de sueños.

    Un fuerte abrazo.

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  5. Pues bebamos, claro que sí. A la salud del cine que se hacía antes. Hablando de viajes cinéfilos, yo lo que más he visitado es el museo del cine de Turín, una maravilla de edificio (La Mole) que guarda tesoros del tipo de guiones originales de Fellini, atrezo de películas de Marilyn, cientos de carteles y muy buenos ciclos temáticos además de múltiples pantallas que presentan sin fin momentos legendarios de cine clásico. Hay apartados dedicados a los géneros y un gigante totem que recuerda a la Cabiria de Pastrone.
    Me temo que las películas de la Ealing ya solo se ven en esos museos.
    Un fuerte abrazo.

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  6. No he visto la película (tarea para la casa) pero como dice el Errabundo, al parecer lo que más llama la atención es ese "pintorequismo escocés" que a mí me llama la atención. Quiero verla.
    en otro orden. Gracias hermano por leer LA PROPIEDAD y por tu comentario que me anima tanto a seguir en este camino un poco árido y solitario de la literatura. Gracias de verdad. Gracias de verdad

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    1. Las costumbres escocesas las retrata muy bien el director. Es una característica de las primeras películas de Mackendrck, en especial de "Whisky a go go" y de "Maggie" (de esta última, algún día colgaré un extracto del libro Cine y Navegación).
      De nada, gracias a ti: lo pasé muy bien leyendo tu relato.
      Abrazos.

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  7. Tengo una remota idea del argumento de la pelicula que nos recuerdas y,la verdad, me encantaría rescatarla de ese olvido...me vienen unas imágenes de botellas flotando en el agua... y tambien
    recuerdo "La Batalla de las Colinas del Whisky", un western bastante gamberro de John Sturges, o aquella de Cary Grant "Operación Whisky" Father Goose en el original...claro que sólo por incluir el liquido elemento en el título. Nada que ver con pescadores de las islas del norte.

    Otra a la lista.

    Un abrazo

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    1. Muy divertida la de Cary Grant, en aquella isla durante la guerra, vigilando los movimientos de los japos, y se encuentra con Leslie Caron de profesora de un montón de niñas.
      Abrazos.

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  8. Mi hermano...Creo que yo soy un marinero frustrado porque me encantan los relatos que tienen que ver con el mar. Debe ser por eso que como no pude embarcarme he sublimado eso escribiendo relatos marinos. Por eso quería enviarte un libro de cuentos que tengo publicado y que lleva por título un relato marinero PORTUGAL MAR AFUERA. Son ocho cuentos cortos. Anota mi correo alijrh@gmail.com y escríbeme por fa

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  9. No puedo añadir nada ante estos interesantes comentarios, empezando porque no la he visto. Pero eso sí, siempre es un placer y un aprendizaje visitar tu blog, como una clase sobre cine.
    Un abrazo.

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    1. No te pierdas las películas de Mackendrick, en especial la de Whisky a go go, pero también todas las que se han nombrado en el post y las que han citado los comentaristas.
      Un abrazo.

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  10. Interesante, tan interesante como el video y el afiche que me ha gustado mucho, nos transporta a las publicidades de esa época.
    Viendo cada una de tus entradas me siento cada vez más ignaro. Hay tanto cine que todavía no he visto... en una década me pongo más o menos al día Ethan, como para seguirte el tranco

    Abrazo!

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    1. jajaja, vale, un década de cine, ¡qué alegría! Un abrazo.

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