Con motivo del centenario de Kirk Douglas (9-12-1916), uno de los grandes del Hollywood dorado, y de los pocos supervivientes de esa época, hemos decidido iniciar un especial dedicado al actor donde se hablará de cinco películas protagonizadas por "el hijo del trapero", tal como el mismo Douglas se llamaba en sus entretenidas memorias. Las iremos publicando por orden cronológico intercaladas con otros posts. Advertimos que del quinteto de reseñas, dos han sido colgadas con anterioridad en el presente portal (aunque ahora hayan sido ligeramente retocadas), pero el resto son inéditas. Espero que las disfruten, o mejor, que vean las películas si es que no las han visto ya.
Río de Sangrees un western de los llamados menores de Howard Hawks, pero que a mi juicio resulta una de sus obras más personales. La cinta propone una historia muy conectada con el descubrimiento del paso hacía el Pacífico. Aunque la película tiene un desarrollo sensiblemente diferente –y una mayor calidad- la trama coincide en su planteamiento con Paso al Noroeste(Northwest Passage de King Vidor, 1940) y Horizontes Azules(The Far Horizons de Rudolph Maté, 1955). Con la segunda, la semejanza también tiene que ver con el conflicto entre los tres personajes principales: dos colonizadores (Kirk Douglas y Martin Dewey) y una indígena (Elizabeth Threatt), por cierto mucho mejor caracterizada que la nativa de la cinta de Maté.
El paisaje y los rodajes exteriores del parque Grand Teton de Wyoming dan una muestra del realismo con el que Hawks se enfrenta a la historia. La película es un bello documental, cuando transcurre de día (la secuencia del remolque de la balsa es de lo mejor que se ha rodado en exteriores), y un relato intimista por la noche, cuando los personajes se despojan de sus ataduras y confiesan sus temores y ambiciones a la luz de las fogatas.
El narrador de la historia es el magnífico tío Zeb (Arthur Hunnicutt), un personaje que emerge progresivamente a medida que transcurre la acción, controlado por un magnífico guión a cargo del reputado Dudley Nichols, habitual colaborador de John Ford en la década de los treinta y cuarenta.
No obstante, el alma de la historia, en el que descansa toda la épica de la aventura que propone Hawks, es el personaje interpretado por Kirk Douglas. Un héroe al estilo de las mejores cintas de Hawks, acompañado del grupo con el que solía estructurar la mayoría de sus películas (el héroe, el joven, el viejo, la chica, etc.) y con el desarrollo de la mayoría de sus habituales subtramas dramáticas: el aprendizaje; el conflicto creado por la mujer a la que desean los dos amigos; el grupo frente al peligro; y la camaradería por encima de todo.
Comparado con los otros “Ríos” de Hawks, Río de Sangre es tan épico como Río Rojo, resulta más entretenido que Río Lobo y se acerca al intimismo de Río Bravo. Pero, sobre todo, está muy bien narrado por uno de lo mejores contadores de historias: Howard Hawks, que aunque se basa en una novela de A.B. Guthrie, no tarda mucho en hacerse con las riendas de la trama para hacerla suya.
Joder con el hijo del trapero. Creo que si repasamos la filmografía de cualquier actor del período clásico de Hollywood nos encontramos (y es normal) que también interpretaron películas muy mediocres, sin embargo no ocurre lo mismo con el gran Kirk Douglas. Creo que es el que menos películas mediocres tiene en su carrera y para mí eso ya es muy importante. Versátil como él solo. A veces vemos más al actor que al personaje que se interpreta y con Kirk no ocurre eso. Desde el mafioso de Retorno al pasado (mira que llega a estar bien allí), pasando por Cautivos del mal, o el Ned Lang de Veinte mil leguas de viaje submarino con su jersey marinero y tupé de gran marino o en Senderos de gloria, El gran carnaval o Espartaco. El otro día lo vi en su cumple con muy buena compañía, incluso Spielberg le dio un beso.
Me uno a la fiesta de este pedazo de actor, amigo mío.
Tiene una filmografía que da vértigo repasarla. Comenzando por "El extraño amor de Marhta Ivers" donde ya robaba planos como si fuera un actor experimentado, y era su debut en pantalla. Así de fuerte pisaba el joven, igual que los personajes que interpretó a lo largo de su dilatada carrera. Todos fuertes y de caracter, como es él mismo. Un actor centenario, eterno. Abrazos
Estoy de acuerdo. Un tipo robaescenas y versátil como pocos. No he visto éste western asi que me queda mucho por descubrir de su filmografía. Teniendo la firma de Hawks es una garantía de entretenimiento. Gracias por la reseña. Estaremos atentos a las siguientes.
La película es muy entretenida, aventuras en el Oeste, más que western a secas. Hawks sorprende por el realismo de las escenas en el río. A Douglas se le dan bien estos papeles de héroe con un aprendiz a su lado; bueno se le dan bien todos los papeles. Abrazos.
Coincido en lo de la filmografía que comentáis de Kirk, pero además, con un añadido a su favor. Mientras que Wayne era el "actor" de Ford o Hawks, Stewart el de Capra, Hitckcock o Mann, y así también con otros... a ver quién no se hace con una buena filmografía en esos casos, el mérito añadido de la de Kirk es que a partir de cierta fecha, muchas de las pelis las hacía él como productor, eran sus proyectos...Y tiene un buen puñado de estupendas películas entre esas. Vale que también lo tiene en otras en las que no "participaba" en la producción (como en "Cautivos de mal", aunque ahí hiciera de productor jaja). Guardo buen recuerdo de esta y siempre quise verla por lo que leí de lo del entierro del dedo en el libro de Hawks y cómo John se había opuesto y tras ver lo bien que quedó en la peli le dijo a Howard que no le discutiría más sobre lo gracioso o no de una escena. Cito de memoria. no voy a levantarme a coger el libro, Ethan.
No sé si tendrá mucho que ver con esta en el planteamiento como las otras dos que mencionas (a mí sí me recuerda por lo de tramperos, mujer india, etc..), pero guardo también un estupendo recuerdo de la de "Más allá del Missouri" de Wellman.
Cierto, en las películas del especial que vienen a continuación (al menos en dos de ellas), Kirk es el productor además de el protagonista. Me suena esa anécdota (yo tampoco voy a coger ningún libro jajaja). La trama en mi opinión tiene mucho que ver con la expedición de Lewis y Clark, aunque no he leido el libro de A.B. Guthrie y no sé si esa era la intención del autor, o fue un añadido de Hawks que siempre hacía suyas los argumentos de otros. Por cierto la novela "The Big Sky" ganó el premio Pulitzer. Abrazos.
Muy bueno aunque infravalorado western con el buen secundario Arthur Hunnicutt (creo que fue nominado al Oscar por esta película) habitual en sus papeles de trampero o vaquero. Recuerdo también al fordiano Hank Worden en el papel de un indio que ha enloquecido. Saludos! Borgo.
Al parecer tuvo bastante éxito cuando se estrenó, pero duraba demasiado para los productores y ya se sabe lo que hacen cuando no están contentos: le dieron a la tijera. El resultado fue un descenso automático de la taquilla. Saludos.
Estupenda noticia la de los especiales sobre Kirk Douglas. Sin duda hay material para grandes reseñas, como esta sobre un western muy entretenido, mejor que Río Lobo sin duda, pero a mi juicio sin la grandeza de Río Rojo. Aquí Hawks rodó una escena con Douglas, la amputación de un dedo, que no había querido hacer Wayne en Río Rojo porque no entendía que pudiera ser divertido algo así. Cuando la vio en Río de sangre, Duke le dijo a Hawks: “Si dices que un funeral es divertido, haré un funeral”. Un abrazo y hasta la próxima entrega.
También prefiero Río Rojo. Cuentas la anécdota del funeral del dedo, sin duda una de las escenas para recordar de esta película cargada de humor negro. Creo que Wayne era el actor con el que primero contó Hawks para hacer la película. Es la misma curiosidad de la que habla David, pero no sé si lo de la amputación fue la causa de que Wayne se negase a participar en la película como asegura Francisco Perales en su libro (al final lo tuve que mirar, David jajaja). Un abrazo a ambos.
Western de grandes espacios abiertos en el que se nos muestra al hombre pionero en su compulsiva necesidad de moverse, avanzar en itinerante y compenetrada lucha con la naturaleza. La justeza en la planificación y la extraordinaria limpieza narrativa, exenta de angulaciones y retórica, confieren a la película un carácter casi de documental. Son muchas las secuencias inolvidables que jalonan el fluido desarrollo de esta obra maestra, prodigio de nitidez, honestidad y sabiduría cinematográfica. Diría que esta película es el cine en su más pura y hermosa manifestación. Más arriba, David menciona acertadamente "MÁS ALLÁ DEL MISSOURI" de William Wellman, obra maestra equiparable y hermanable con la que ahora nos ocupa.
Lo de "compulsiva necesidad de moverse" es la definición de cualquier personaje protagonizado por Kirk Douglas, muy acertada. Es verdad que el realismo de algunas secuencias nos llevan casi al documental. La de Wellman la vi hace tanto tiempo que ya se merece una revisión. No sé por qué la confundo siempre con "Los implacables", también con un maduro Gable y dirigida por Walsh, aunque ésta si la emparentamos con alguna de Hawks sería más bien con Río Rojo que con cualquier otra. Saludos
No es de las, digamos, punteras en la filmografía de Douglas (algunas de las más conocidas las veremos a continuación), pero injustamente a mi parecer.
Joder con el hijo del trapero. Creo que si repasamos la filmografía de cualquier actor del período clásico de Hollywood nos encontramos (y es normal) que también interpretaron películas muy mediocres, sin embargo no ocurre lo mismo con el gran Kirk Douglas. Creo que es el que menos películas mediocres tiene en su carrera y para mí eso ya es muy importante. Versátil como él solo. A veces vemos más al actor que al personaje que se interpreta y con Kirk no ocurre eso. Desde el mafioso de Retorno al pasado (mira que llega a estar bien allí), pasando por Cautivos del mal, o el Ned Lang de Veinte mil leguas de viaje submarino con su jersey marinero y tupé de gran marino o en Senderos de gloria, El gran carnaval o Espartaco. El otro día lo vi en su cumple con muy buena compañía, incluso Spielberg le dio un beso.
ResponderEliminarMe uno a la fiesta de este pedazo de actor, amigo mío.
Un abrazo
Tiene una filmografía que da vértigo repasarla. Comenzando por "El extraño amor de Marhta Ivers" donde ya robaba planos como si fuera un actor experimentado, y era su debut en pantalla. Así de fuerte pisaba el joven, igual que los personajes que interpretó a lo largo de su dilatada carrera. Todos fuertes y de caracter, como es él mismo. Un actor centenario, eterno.
EliminarAbrazos
Estoy de acuerdo. Un tipo robaescenas y versátil como pocos.
ResponderEliminarNo he visto éste western asi que me queda mucho por descubrir de su filmografía. Teniendo la firma de Hawks es una garantía de entretenimiento.
Gracias por la reseña. Estaremos atentos a las siguientes.
Un abrazo
La película es muy entretenida, aventuras en el Oeste, más que western a secas. Hawks sorprende por el realismo de las escenas en el río. A Douglas se le dan bien estos papeles de héroe con un aprendiz a su lado; bueno se le dan bien todos los papeles.
EliminarAbrazos.
Coincido en lo de la filmografía que comentáis de Kirk, pero además, con un añadido a su favor. Mientras que Wayne era el "actor" de Ford o Hawks, Stewart el de Capra, Hitckcock o Mann, y así también con otros... a ver quién no se hace con una buena filmografía en esos casos, el mérito añadido de la de Kirk es que a partir de cierta fecha, muchas de las pelis las hacía él como productor, eran sus proyectos...Y tiene un buen puñado de estupendas películas entre esas. Vale que también lo tiene en otras en las que no "participaba" en la producción (como en "Cautivos de mal", aunque ahí hiciera de productor jaja).
ResponderEliminarGuardo buen recuerdo de esta y siempre quise verla por lo que leí de lo del entierro del dedo en el libro de Hawks y cómo John se había opuesto y tras ver lo bien que quedó en la peli le dijo a Howard que no le discutiría más sobre lo gracioso o no de una escena. Cito de memoria. no voy a levantarme a coger el libro, Ethan.
No sé si tendrá mucho que ver con esta en el planteamiento como las otras dos que mencionas (a mí sí me recuerda por lo de tramperos, mujer india, etc..), pero guardo también un estupendo recuerdo de la de "Más allá del Missouri" de Wellman.
Un abrazo.
Cierto, en las películas del especial que vienen a continuación (al menos en dos de ellas), Kirk es el productor además de el protagonista.
EliminarMe suena esa anécdota (yo tampoco voy a coger ningún libro jajaja).
La trama en mi opinión tiene mucho que ver con la expedición de Lewis y Clark, aunque no he leido el libro de A.B. Guthrie y no sé si esa era la intención del autor, o fue un añadido de Hawks que siempre hacía suyas los argumentos de otros. Por cierto la novela "The Big Sky" ganó el premio Pulitzer.
Abrazos.
Muy bueno aunque infravalorado western con el buen secundario Arthur Hunnicutt (creo que fue nominado al Oscar por esta película) habitual en sus papeles de trampero o vaquero. Recuerdo también al fordiano Hank Worden en el papel de un indio que ha enloquecido.
ResponderEliminarSaludos!
Borgo.
Al parecer tuvo bastante éxito cuando se estrenó, pero duraba demasiado para los productores y ya se sabe lo que hacen cuando no están contentos: le dieron a la tijera. El resultado fue un descenso automático de la taquilla.
EliminarSaludos.
Estupenda noticia la de los especiales sobre Kirk Douglas. Sin duda hay material para grandes reseñas, como esta sobre un western muy entretenido, mejor que Río Lobo sin duda, pero a mi juicio sin la grandeza de Río Rojo. Aquí Hawks rodó una escena con Douglas, la amputación de un dedo, que no había querido hacer Wayne en Río Rojo porque no entendía que pudiera ser divertido algo así. Cuando la vio en Río de sangre, Duke le dijo a Hawks: “Si dices que un funeral es divertido, haré un funeral”. Un abrazo y hasta la próxima entrega.
ResponderEliminarTambién prefiero Río Rojo. Cuentas la anécdota del funeral del dedo, sin duda una de las escenas para recordar de esta película cargada de humor negro. Creo que Wayne era el actor con el que primero contó Hawks para hacer la película. Es la misma curiosidad de la que habla David, pero no sé si lo de la amputación fue la causa de que Wayne se negase a participar en la película como asegura Francisco Perales en su libro (al final lo tuve que mirar, David jajaja).
ResponderEliminarUn abrazo a ambos.
Western de grandes espacios abiertos en el que se nos muestra al hombre pionero en su compulsiva necesidad de moverse, avanzar en itinerante y compenetrada lucha con la naturaleza. La justeza en la planificación y la extraordinaria limpieza narrativa, exenta de angulaciones y retórica, confieren a la película un carácter casi de documental. Son muchas las secuencias inolvidables que jalonan el fluido desarrollo de esta obra maestra, prodigio de nitidez, honestidad y sabiduría cinematográfica. Diría que esta película es el cine en su más pura y hermosa manifestación.
ResponderEliminarMás arriba, David menciona acertadamente "MÁS ALLÁ DEL MISSOURI" de William Wellman, obra maestra equiparable y hermanable con la que ahora nos ocupa.
Lo de "compulsiva necesidad de moverse" es la definición de cualquier personaje protagonizado por Kirk Douglas, muy acertada. Es verdad que el realismo de algunas secuencias nos llevan casi al documental.
EliminarLa de Wellman la vi hace tanto tiempo que ya se merece una revisión. No sé por qué la confundo siempre con "Los implacables", también con un maduro Gable y dirigida por Walsh, aunque ésta si la emparentamos con alguna de Hawks sería más bien con Río Rojo que con cualquier otra.
Saludos
La recuerdo vagamente. Tengo que volver a verla.
ResponderEliminarNo es de las, digamos, punteras en la filmografía de Douglas (algunas de las más conocidas las veremos a continuación), pero injustamente a mi parecer.
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