Genuine |
1. INTRODUCCIÓN.
Si
quisiéramos resaltar los tres acontecimientos cinematográficos de la etapa muda
que más influyeron en el cine posterior, y asociarlos a una película en
concreto, sin lugar a dudas elegiríamos: El nacimiento de una
nación (The Birth of a nation, 1915) de David Wark Griffith, por lo que
supuso para el desarrollo del lenguaje cinematográfico; El acorazadoPotemkim (Bronenosets Potiomkim, 1925) por su tratamiento del montaje; y
finalmente El Gabinete del Dr. Caligari (Das Kabinett des Doktor
Caligari, 1919) como representante del Expresionismo. De este último movimiento
es de lo que tratan los siguientes párrafos. De cómo se originó, de sus
características principales, de los autores y sus obras más representativas y
de su evolución e influencia posterior.
En
primer lugar habría que definir qué se entiende por Expresionismo. Diversos
autores tratan de definirlo relacionándolo con la corriente artística de
vanguardia que se produjo en Alemania entre 1910 y 1920, presentando una
alternativa al romanticismo decimonónico. Otros autores se decantan por una
definición más amplia, sin límite de tiempo, en la cual se incluya a toda obra
que "utilice la deformación artística como vehículo del estado emocional
del artista"[1].
2. ANTECEDENTES.
2.1. El nacimiento del
Expresionismo.- Las
fuentes de las que bebe el Expresionismo habría que buscarlas en primer lugar
en Nietzsche. Este profeta de la destrucción de la moral vigente en el s. XIX y
su pensamiento constituye una referencia obligada del movimiento revolucionario
que iba a nacer a primeros del siglo XX. Las dudas por el mañana, la inflación
galopante, el paro y el pesimismo en general se iban a adueñar de las mentes de
los artistas de vanguardia. Como fruto de esta rebelión intelectual surge el
Expresionismo, chocando frontalmente con el movimiento imperante hasta ese
momento: El Impresionismo. El Impresionismo es optimista, objetivo, las cosas
se representan tal como son, es el arte del golpe de vista. En el Expresionismo
predomina el pesimismo, la subjetividad, la desconfianza sobre los datos de la
realidad. Los objetos ya no son nada por sí mismos, el artista deja de ser un
mero receptor para convertirse en un emisor de sentimientos a través de los
hechos, de las cosas. Deforma la realidad para expresar su estado anímico a
través de ella. Es ésta y no otra la verdadera revolución del Expresionismo.
2.2. Orígenes del cine
expresionista.- El movimiento expresionista se desarrolló en diferentes sectores
artísticos: pintura, escultura, literatura, arquitectura, música y cine. Las
primeras películas expresionistas aparecieron tardíamente, después de la Gran
Guerra, con el régimen de la República
de Weimar ya instaurado. Es justo en ese momento cuando se inicia una
divulgación expresionista de las ideas que fueron desarrolladas antes de la
guerra. Casi se institucionaliza el movimiento, precisamente cuando el
movimiento se encuentra en decadencia. Las razones de este retraso se deben a
la poca aceptación que el cine tenía en la sociedad alemana en los años
anteriores a la guerra. Este recelo que despertó el séptimo arte sobre la clase
media germana no desapareció hasta la fundación de la U.F.A. (Universumfilm
Aktiengesellschaft), productora que colaboró activamente con el régimen de
Weimar.
El Golem |
Pero ¿Cuáles fueron los verdaderos antecedentes del cine expresionista? Sin duda, el teatro ejerció una influencia decisiva, como en tantas otras ocasiones. Hay dos figuras que sobresalen por encima de las demás: El director de teatro Max Reinhardt y uno de sus actores, y posterior director de cine, Paul Wegener. Con respecto al primero cabe destacar la utilización de las luces y sombras en sus puestas en escena. En ellas hacía pasar a los actores por delante de proyectores de luz estratégicamente situados para que las sombras de los personajes emergieran gigantescas y se deslizaran por las paredes del escenario evocando persecuciones de demonios. La influencia que ejerció sobre obras como El estudiante de Praga (Der Student von Prag, 1913), Caligari y Nosferatu, por poner sólo unos ejemplos, son del todo evidentes.
En
cuanto a Wegener realizó dos filmes con tintes expresionistas: el ya comentado
El estudiante de Praga y El Golem (Der Golem, 1915), del cual haría una remake en 1920. En El estudiante de
Praga, rodada en exteriores, ya se pueden observar las sombrías calles
fruto de la influencia del teatro de Reinhardt. Calles que posteriormente se
recrearían en estudio, en títulos emblemáticos del Expresionismo y del
Neoexpresionismo. El argumento refleja ese desasosiego interior y pesimismo del
hombre que vende su imagen al diablo. En este tipo de guiones, la huella del
Romanticismo se encuentra presente al tratar temas de carácter fantástico,
terrorífico o sobrenatural que proceden de la tradición popular alemana. Es
también el caso de El Golem, leyenda judía acerca de una criatura
de barro, creada por un rabino para proteger al pueblo del gueto de Praga, pero
que se rebela contra su dueño y finalmente constituye una amenaza. La estética
expresionista de este filme se hace evidente, sobre todo en la versión de 1920,
al representar las calles angostas y ondulantes del gueto deformadas por el
juego de luces. Éste y otros filmes demuestran que la herencia romanticista es
fundamental para el posterior desarrollo del Expresionismo cinematográfico.
Otros
autores de esta época son Max Mack y su película El Otro (Der
Andere, 1913), el danés Stellan Rye con La casa sin puertas ni
ventanas (1914) y Otto Rippert que dirige el melodrama en seis partes
Homunculus (1916).
[1]Casals,
Josep. El Expresionismo. (Barcelona: Montesinos, 1982) Pg.7.
Continuar leyendo.
Amigo Ethan, en unos días recordaremos en venusyjanóbriga a Fritz Lang. Muy bien esta aproximación al expresionismo, hoy tan olvidado.
ResponderEliminarEstupendo! Vamos a complementar información.
EliminarUn abrazo!
Hola, Ethan
ResponderEliminarMuy interesante esta sección que comienzas, ten por seguro que seguiré cada artículo que publiques sobre el tema. La verdad es que con este primero ya das pie al debate, aunque sea introductorio de los que publiques después. Te comento: la clara influencia de Nietzsche. Bueno, esa es una opinión de algunos autores, no de todos, que no veo demasiado clara. Está claro que en Alemania no puede surgir sino en ese momento, devastada por la guerra, con una economía resquebrajada y prácticamente en la miseria. Por ahí lo del pesimismo frente al positivismo. Pero también hay autores que sostienen las influencia clara del simbolismo, e incluso ven al movimiento como un desarrollo del postimpresionismo, en lugar de como algo que surge por oposición. Cezanee, Van Gogh o Gauguin, y hasta el gótico como sus antecedentes, ahora con una situación histórica distinta. Y a mi me parece que no les falta razón.
Bueno, mucha tela que cortar aquí. Lo dicho, ya estoy deseando leer el próximo.
Saludos!
Con respecto a Nietzsche y su influencia, realmente el movimiento expresionista nace antes de la Gran Guerra. Desde luego, el expresionismo se realimenta con los desastres del conflicto y con la crisis económica posterior, pero ya había amargura y pesimismo en los círculos intelectuales alemanes antes de 1914.
EliminarSaludos!
Nosferatu de Murnau es sobrecogedor: sus luces, sus sombras y sus uñas (aunque he de reconocer que el Kinsky de Herzog es de lo mejor para guardar un grato recuerdo de cine de actor, desmedido pero bien dirigido).
ResponderEliminarY un especial recuerdo para el doctor Mabuse y no digo más que veo que has posteado con un (I) lo que significa que tienes más madera...
Un abrazo
De todos ellos hablaremos en su momento, Murnau, Lang, Wiene, etc.
EliminarUn abrazo
Interesantísimo. Esperamos con expectación la siguiente entrega.
ResponderEliminarSerá pronto, antes colgaremos alguna reseña y otras cosas más en medio.
Eliminar¡Genial! Esto sí que es un retorno vacacional enérgico.
ResponderEliminarSaludos.
Vamos a ver si el escaso tiempo que tengo me permite actualizar el blog con más frecuencia esta temporada.
EliminarSaludos!
Qué buena idea Ethan! Te felicito ya por adelantado por estas series de entradas sobre el expresionismo, un movimiento muy interesante y todavía imitado. Esperaremos con ganas el segundo "capítulo".
ResponderEliminarUn abrazo
Yo confieso, que como amante del cine negro siempre me ha interesado el Expresionismo.
EliminarUn abrazo.
Es un tema interesante del que no sé demasiado. Espero tus siguientes entradas para aprender más.
ResponderEliminarSaludos
Muy interesante, que no se hagan de rogar las siguientes entregas. Gracias, y saludos
ResponderEliminarMaribel, Rafa: Espero continuar dentro de poco, pero hay que alternar con otros temas...
ResponderEliminarSaludos
No me habñia dado cuenta de tu regreso, y pisando fuerte por lo que veo!!! Me ha gustado la entrada, porque es una corriente cuya existencia conzco, pero poco más, y menos en la parte que concierne al cine. Un abrazo!
ResponderEliminarUna corriente fundamental para entender, por ejemplo, de dónde viene el cine de terror de los años treinta en Estados Unidos o el cine negro neoexpresionista. De todo ello hablaremos próximamente.
EliminarUn abrazo!
Ay, qué maravilla. Gracias por recordar el Expresionismo. ¿Fue un momento de mucha libertad en el caos de esa vieja Alemania? Y luego perduró, en muhcas películas. Quizá parecen algo incoentes, ¡¡¡¡pero qué estética tan potente!!!!
ResponderEliminarSaludos.
Una estética inconfundible, muy reconocible, el juego con las luces y las sombras nos parece que haya existido siempre, pero en aquella época hay que pensar que la estaban inventando!!
EliminarVaya tesis que has desarrollado Ethan, has vuelto con las pilas puestas. No he visto ninguno de los clásicos expresionistas todavía pero hace no mucho me vi "La Noche del Cazador", de Charles Laughton, y a pesar de ser una cinta de los años 50 se aprecia una fuerte influencia expresionista en la utilización de la luz y las sombras. Queda muy bien porque le da aroma de cuento clásico, lo que realmente es la película.
ResponderEliminarUn saludo
Inevitable será referirnos a "La Noche del Cazador" cuando hablemos del Neoexpresionismo. De esa obra maestra y de otras grandes películas y autores.
EliminarSaludos.
Magnífico, Ethan. La esencia del cine en estado puro; la alquimia de los nitratos, la plata y las manivelas. El territorio de las sombras mágicas Un buen comienzo de curso, si Sr. Abrazos
ResponderEliminarPara nosotros, amantes del cine negro, este tema es apasionante. Se estaba cocinando una estética que luego utilizarían los directores del noir.
EliminarUn abrazo.
Muy interesante entrada y un género que voy descubriendo poco a poco.
ResponderEliminarComo dices, a los que nos gusta el género negro, el expresionismo alemán nos parece una maravilla.
Saludos.
La propia Manderly tiene esa estética, gótica y expresionista. No me extraña que te guste el movimiento. Saludos
EliminarMuchas gracias. Me encanta Nosferatu, tengo para ver la decaligari, me gusta Fritz Lang y su M, me encanta ese estilo barroco y sugerente... y resulta desolador pensar en la cantidad de talentos de todo tipo que Alemania acabó tirando por la ventana.
ResponderEliminarUn saludo, y no tardes en continuar ;)
Muchos de ellos consiguieron salir de allí y nosotros ganamos con su valentía, ahora podemos disfrutar de los Siodmak, Lang, Wilder, etc.
EliminarUn saludo.
Lo que se aprende aquí.
ResponderEliminarGracias por instruirnos.
El intercambio de información es lo que hace grande este mundo bloguero. Gracias a ti por pasar por aquí.
EliminarSaludos!
Lo que más me gusta de este cine es el uso de la iluminación, los decorados y el diseño. ¡Sabes de algún libro que se centre en estos temas? He buscado alguno sobre el autor de los magníficos dibujos de producción de Nosferatu y nada...
ResponderEliminarEn Caligari es casi más importante el director artístico (los directores artísticos porque eran varios) que el realizador. Esos dibujos en tela son espectaculares. Y luego las sombras, claro, es el sello característicos de este movimiento en el cine. Lo siento, pero no tengo ni idea de dónde conseguir esos dibujos que buscas.
EliminarEn el libro de Luciano Berriatúa sobre Nosferatu viene algo de éso, no sé si será lo que buscas.
EliminarMuchas gracias, Anónimo.
EliminarPor cierto, que la foto que abre este artículo no es de El Gabinete del Doctor Caligari. Es de Genuine.
ResponderEliminarTienes toda la razón, Anónimo, ahora mismo lo cambio. Muchas Gracias.
EliminarOs confirmo que el tipo que hizo la mayoría de los dibujos de Nosferatu fue Albin Grau, uno de los colaboradores de Murnau que estaba muy interesado en el ocultismo. Yo los que llevo años buscando infructuosamente son los de Caligari, igual es que ni se conservan...
ResponderEliminarComo me gusta ese cine alemán, esas luces, esas imágenes deformadas. Ese gabinete del dr Caligari!!! Seguro que con la excusa de esta serie que empiezas me vuelvo a ver Nosferatu, y unas cuantas más. Y de paso aprender y descubrir. Es genial la idea.
ResponderEliminarBiquiños
Siempre es buen momento para volver a esas maravillosas películas donde las sombras son protagonistas.
EliminarBesos