Inocencia sin defensa (Nevinost bez zastite, 1968)
Uno
de los mejores directores serbios, de los más conocidos a nivel internacional, fue,
sin duda, Dusan Makavejev. Recientemente fallecido, Makavejev fue un cineasta de
vanguardia, que vivió una gran parte de su carrera exiliado por sus críticas
hacia el régimen comunista, y por su empeño en no cambiar su discurso
experimental y provocativo.
Las
películas de Makavejev han sido tan alabadas como criticadas y hasta prohibidas,
pero nunca han dejado indiferente a nadie. Hoy traemos dos de sus mejores
filmes, acaso los más representativos. Comenzamos con Inocencia sin
defensa, un peculiar documental acerca de la primera película sonora yugoslava,
producida en plena ocupación nazi.
La
cinta trata de las vicisitudes por las que tuvieron que pasar productor,
director y actores para rodar aquel filme maldito titulado Nevinost bez
zastite (la historia del cine serbio lo ha ignorado siempre, no lo ha
tenido en cuenta precisamente por haber sido rodado durante la invasión
alemana); pero también se centra en la vida y obra de Dragoljub Alecsik, el guionista,
director y protagonista del mediocre melodrama, un personaje difícil de
clasificar al que Makavejev caricaturiza en el pasado, en los años cuarenta durante
la producción de la pionera cinta, pero también en el presente, en 1968.
Makavejev
se vale del extraño Alecsik, un acróbata, atleta, herrero-forzudo, personaje de
circo, para denunciar, por un lado la ocupación nazi y, por otro, la
estalinista en un año crucial en Europa y en todo el mundo, con revoluciones
por doquier en el viejo continente como la de mayo en París o la primavera de
Praga.
La
película de Alecsik es mala a rabiar, pero tiene su encanto y se vuelve
surrealista en manos de Makavejev que la usa para sus propósitos. El
comportamiento bizarro de Alecsik va in crescendo hasta convertirse en
patético cuando quiere emular las hazañas de su otro yo en el pasado. El
director adorna el documental pintando fotogramas para hacerlo más expresivo
aún, y rodea toda la historia de un humor muy característico, presente en casi
toda su obra.
Los
misterios del organismo (W.R.-Misterije
organizma,1971)
El siguiente largometraje
de Makavejev sigue la misma línea que el anterior, aunque más críptico y
simbólico, y con un punto más de abstracción. Porque Los misterios del
organismo es, en realidad, un falso documental, otro collage
como el de Inocencia sin defensa, esta vez acerca de un supuesto
médico que utiliza el sexo para curar tanto enfermedades psiquiátricas como de
otro tipo.
El grupo que se somete al
tratamiento de tan singular doctor parece más una secta que otra cosa.
Makavejev filma la “terapia” y no se reprime nada a la hora de rodar. La
película fue un escándalo en su día y fue cortada a placer, nunca mejor dicho.
Las escenas de sexo explícito, las pinturas y fotografías pornográficas, la del
documento inicial o la de la mujer haciendo un molde del pene a un amigo desaparecieron
del metraje.
De nuevo el humor del
director impregna toda la cinta. Así, la especie de armario utilizada en los
experimentos “sanadores” se parece mucho al orgasmatrón ⸺¿se acuerdan de
aquel ingenio en la desternillante El dormilón (Sleeper, 1973) de
Woody Allen?⸺; mientras que la historia de ficción que inserta Makavejev en el
espurio documento es de lo más surrealista: un par de mujeres intentan enamorar
a un famoso patinador soviético.
El realizador vuelve al
tono circense, por otro lado muy felliniano, de Inocencia sin
defensa, pero sin abandonar el estilo documental. Tampoco la denuncia que, de
soslayo, hace la de ocupación soviética, ridiculizando al máximo al estalinismo,
lo que, a la postre, le supuso tener que abandonar su país.
Que tal Ethan!
ResponderEliminarReconozco mi ignorancia, ni idea de los titulos, anotados quedan. Cada vez estoy mas convencido, harían falta varias vidas para ponerse al dia con todo lo filmado...
Saludos y feliz semana!
Tienes razón, es un número infinito de títulos, se hace lo que se puede. De todas formas, si te encuentras con un título de Dusan Makavejev, merece la pena echarle un vistazo.
EliminarSaludos!
lamentablemente nuca escuché de él porque si decís que es importante lo debe ser, pero lo que mostrás confirma un poco lo que decís en cuanto a que me parece muy interesante y jugado su cine por temática.
ResponderEliminarLa escena de de Woody Allen la recuerdo, era muy graciosa. Saludos
Desde luego Makavjev no era un cineasta para el gran público. Me imagino que en los setenta sus obras se proyectaban en cines de aquellos que se llamaban de "Arte y ensayo". No obstante, recomiendo descubrir su obra: estas dos películas o "Sweet Movie", por ejemplo, no te van a dejar indiferente.
EliminarSaludos.
No he tenido ocasión de ver los dos títulos que analizas, pero sí "Sweet Movie", que comenté en su día: http://cinefiliasantmiquel.blogspot.com/2018/05/sweet-movie-1974.html
ResponderEliminarDoy fe de que su cine no deja indiferente.
Saludos.
Sweet Movie es otro collage muy "dulce", tal como anuncia el título. Ahora me paso a leer tu reseña de esta película provocadora de Makavejev.
ResponderEliminarSaludos
Recuerdo que esta película -que vi a las tantas en la 2- conseguía grandes colas en la época del cine de destape. Los espectadores que esperaban ver algo del tono de "Enmanuelle" debieron quedar bastante descolocados al ver escenas como la del electroshock real.
ResponderEliminarSaludos!
Borgo.
Provocador Makavejev y más en esa época del destape aquí en España, pero es verdad que no tiene nada que ver con aquellos filmes eróticos.
EliminarSaludos
¡Hola!
ResponderEliminarPues no conocía ninguna de las pelis/director, y me han llamado tanto la atención que tomo buena nota.
Feliz noche.
No es un director muy conocido en nuestro país, aunque sí a nivel mundial. Merece la pena acercarse a su obra. Yo comenzaría por la primera de las películas que hoy comento.
EliminarSaludos!