Editorial Cátedra
Colección Signo e Imagen / Cineastas,
2ª edición ampliada: 2010.
Diseño de la colección: Manuel Bonsoms
ISBN: 978-84-376-2576-8
Género: Ensayo cinematográfico
Nacido en Madrid en 1958, Carlos Aguilar es historiador y crítico de cine, así como novelista. Con estudios en Psicología, realiza posteriormente cursos de cine en el Taller de Arte Imaginarias. Desde ese momento dirige su vocación y su profesión hacia el Séptimo Arte, donde ha logrado convertirse en un sólido y competente especialista. Ha trabajado tanto en tareas de dirección y organización de festivales y eventos cinematográficos, como en el propiamente dedicado al análisis y la escritura sobre películas en prestigiosas revistas españolas y extranjeras. Ha participado, asimismo, en la publicación de distintos volúmenes, en colaboración y colectivos, sobre historia y crítica cinematográfica. De los libros de producción propia y de su entera responsabilidad seleccionamos los siguientes: Joaquín Romero Marchent. La firmeza del profesional y Jess Franco. El sexo del horror, ambos de 1999; Ricardo Palacios. Actor, director, observador y Giuliano Gemma. El factor romano, ambos de 2003; La espada mágica. El cine fantástico de aventuras (2006), Sergio Leone, Guía del Cine y la monografía que ahora reseñamos, Clint Eastwood, de 2009.
Publicado inicialmente en 2009, el ensayo sobre la vida y obra de Eastwood llega ahora a las librerías en una edición ampliada. Y es que nuestro personaje, Clinton Eastwood Jr., quien nació en mayo de 1930 en la ciudad de San Francisco (EEUU), ha cumplido ya unos muy respetables 80 años. Pero, por lo que podemos comprobar no son sólo «muy respetables», sino al mismo tiempo muy productivos y provechosos. Una leyenda viva del cine, pues, en forma y en todavía en activo. Digámoslo sin más rodeos: Clint Eastwood es el gran clásico del cine de quien aún podemos esperar interesantes realizaciones. Cierto que Francis Ford Coppola y Martin Scorsese, por ejemplo, continúan al pie del plató, y acaso puedan sorprender al espectador con alguna próxima producción memorable. Pero junto a estos gigantes del celuloide y el vídeo, Eastwood sobresale, sin reservas, como grande entre los grandes.
En el cine, Eastwood ha sido y lo es todo, o casi todo. Actor, director, productor, músico, a menudo, desarrollando el conjunto de sus habilidades en una misma obra, Clint Eastwood es un creador todoterreno. Está en su papel tanto en la comedia (ligera o romántica) y el musical como en el drama, el western, el cine bélico y de boxeo, el thriller y el cine de acción. Y aunque, a la vista de su extensísima obra no pueden ocultarse trabajos de menor calibre, la suma de la misma (repetimos, sin haberse cerrado) puede cotejarse (y codearse) sin exageración ni afectación con el selecto club de Clásicos del Cine de todos los tiempos. Una obra, y acaso sea esto lo esencial, que contiene títulos fundamentales, así como incontestables masterpieces de la historia del cine: Sin perdón (Unforgiven, 1992), Los puentes de Madison (The Bridges of Madison County, 1995), Million Dollar Baby (2004).
Acierta de pleno el autor de la presente monografía, señalando los dos rasgos básicos de Clint Eastwood. Por un lado, ya lo hemos visto, su carácter polifacético. Por el otro, la masculinidad. Paradigma del «tipo duro», Eastwood no es ni bueno ni feo ni malo. Esté en la jungla humana, en la cuerda floja, fuera de la ley o en el jardín del bien y del mal, se exhibe en todo momento violento, implacable y que no perdona, duro de pelar, bronco, una mula, de corazón negro y de hierro, sucio, fuerte y ejecutor. Pero, asimismo, también puede resultar seductor, tierno, muy caliente y tremendamente romántico. Sea a lomos de un caballo o caminando sobre sus largas piernas, empuñando un fusil de asalto, un revólver, unos guantes de boxeo o una cámara fotográfica.
“Es irrefutable –nos dice C. Aguilar- que la obra de Clint Eastwood entraña, tanto literal como alegóricamente, una vasta y elocuente incluso descarnada radiografía de la idiosincrasia de los Estados Unidos; sus sueños e ideales sus arquetipos y peculiaridades, sus paradojas y contradicciones, sus filias y sus fobias, sus luces y tinieblas, su privativa visión de la existencia...en resumen, y valga la simplificación, su peculiar mixtura de ingenuidad, ideológica, y firmeza, vital. Desde este ángulo, la abultada aportación de Eastwood al Séptimo Arte encierra un enorme, un inapreciable valor histórico-sociológico.”
Como es habitual en la colección que recoge la presente monografía sobre Clint Eastwood, el libro, amén de las secciones biográficas y analíticas necesarias para conocer y valorar la obra del personaje, así como las imprescindibles fotografías que la ilustran, ofrece una Filmografía y una Bibliografía actualizadas. Y, aunque esto ya no es tan habitual, constatemos que en sus páginas el lector encontrará un texto muy correcto en el análisis cinematográfico y muy bien escrito, todo lo cual hace de esta edición un libro imprescindible para conocer y valorar, como se merece, el trabajo del último clásico vivo del cine contemporáneo.
Ariodante
Colección Signo e Imagen / Cineastas,
2ª edición ampliada: 2010.
Diseño de la colección: Manuel Bonsoms
ISBN: 978-84-376-2576-8
Género: Ensayo cinematográfico
Nacido en Madrid en 1958, Carlos Aguilar es historiador y crítico de cine, así como novelista. Con estudios en Psicología, realiza posteriormente cursos de cine en el Taller de Arte Imaginarias. Desde ese momento dirige su vocación y su profesión hacia el Séptimo Arte, donde ha logrado convertirse en un sólido y competente especialista. Ha trabajado tanto en tareas de dirección y organización de festivales y eventos cinematográficos, como en el propiamente dedicado al análisis y la escritura sobre películas en prestigiosas revistas españolas y extranjeras. Ha participado, asimismo, en la publicación de distintos volúmenes, en colaboración y colectivos, sobre historia y crítica cinematográfica. De los libros de producción propia y de su entera responsabilidad seleccionamos los siguientes: Joaquín Romero Marchent. La firmeza del profesional y Jess Franco. El sexo del horror, ambos de 1999; Ricardo Palacios. Actor, director, observador y Giuliano Gemma. El factor romano, ambos de 2003; La espada mágica. El cine fantástico de aventuras (2006), Sergio Leone, Guía del Cine y la monografía que ahora reseñamos, Clint Eastwood, de 2009.
Publicado inicialmente en 2009, el ensayo sobre la vida y obra de Eastwood llega ahora a las librerías en una edición ampliada. Y es que nuestro personaje, Clinton Eastwood Jr., quien nació en mayo de 1930 en la ciudad de San Francisco (EEUU), ha cumplido ya unos muy respetables 80 años. Pero, por lo que podemos comprobar no son sólo «muy respetables», sino al mismo tiempo muy productivos y provechosos. Una leyenda viva del cine, pues, en forma y en todavía en activo. Digámoslo sin más rodeos: Clint Eastwood es el gran clásico del cine de quien aún podemos esperar interesantes realizaciones. Cierto que Francis Ford Coppola y Martin Scorsese, por ejemplo, continúan al pie del plató, y acaso puedan sorprender al espectador con alguna próxima producción memorable. Pero junto a estos gigantes del celuloide y el vídeo, Eastwood sobresale, sin reservas, como grande entre los grandes.
En el cine, Eastwood ha sido y lo es todo, o casi todo. Actor, director, productor, músico, a menudo, desarrollando el conjunto de sus habilidades en una misma obra, Clint Eastwood es un creador todoterreno. Está en su papel tanto en la comedia (ligera o romántica) y el musical como en el drama, el western, el cine bélico y de boxeo, el thriller y el cine de acción. Y aunque, a la vista de su extensísima obra no pueden ocultarse trabajos de menor calibre, la suma de la misma (repetimos, sin haberse cerrado) puede cotejarse (y codearse) sin exageración ni afectación con el selecto club de Clásicos del Cine de todos los tiempos. Una obra, y acaso sea esto lo esencial, que contiene títulos fundamentales, así como incontestables masterpieces de la historia del cine: Sin perdón (Unforgiven, 1992), Los puentes de Madison (The Bridges of Madison County, 1995), Million Dollar Baby (2004).
Acierta de pleno el autor de la presente monografía, señalando los dos rasgos básicos de Clint Eastwood. Por un lado, ya lo hemos visto, su carácter polifacético. Por el otro, la masculinidad. Paradigma del «tipo duro», Eastwood no es ni bueno ni feo ni malo. Esté en la jungla humana, en la cuerda floja, fuera de la ley o en el jardín del bien y del mal, se exhibe en todo momento violento, implacable y que no perdona, duro de pelar, bronco, una mula, de corazón negro y de hierro, sucio, fuerte y ejecutor. Pero, asimismo, también puede resultar seductor, tierno, muy caliente y tremendamente romántico. Sea a lomos de un caballo o caminando sobre sus largas piernas, empuñando un fusil de asalto, un revólver, unos guantes de boxeo o una cámara fotográfica.
“Es irrefutable –nos dice C. Aguilar- que la obra de Clint Eastwood entraña, tanto literal como alegóricamente, una vasta y elocuente incluso descarnada radiografía de la idiosincrasia de los Estados Unidos; sus sueños e ideales sus arquetipos y peculiaridades, sus paradojas y contradicciones, sus filias y sus fobias, sus luces y tinieblas, su privativa visión de la existencia...en resumen, y valga la simplificación, su peculiar mixtura de ingenuidad, ideológica, y firmeza, vital. Desde este ángulo, la abultada aportación de Eastwood al Séptimo Arte encierra un enorme, un inapreciable valor histórico-sociológico.”
Como es habitual en la colección que recoge la presente monografía sobre Clint Eastwood, el libro, amén de las secciones biográficas y analíticas necesarias para conocer y valorar la obra del personaje, así como las imprescindibles fotografías que la ilustran, ofrece una Filmografía y una Bibliografía actualizadas. Y, aunque esto ya no es tan habitual, constatemos que en sus páginas el lector encontrará un texto muy correcto en el análisis cinematográfico y muy bien escrito, todo lo cual hace de esta edición un libro imprescindible para conocer y valorar, como se merece, el trabajo del último clásico vivo del cine contemporáneo.
Ariodante
La verdad es que toda esta colección de la editorial Cátedra es todo un regalo para los cinéfilos. Este nuevo título, dedicado a Eastwood, pinta la mar de interesante. No cabe la menor duda de que esta leyenda viva sigue dándole caña a la cámara, para goce de todos nosotros. Eso si que es una vejez venerable, lo demás son cuentos.
ResponderEliminarUn abrazote.
Está claro que Eastwood y su cine, dan para mucho.
ResponderEliminarEl libro parece interesante.
Me parece muy buena recomendación. La cita sobre la identificación de la obra de Eastwood y la idiosincarasia amerciana es toda una síntesis.
ResponderEliminarDe Eastwood, El Million Dollar Baby no me convenció tanto, prefiero El Sin Perdón, Los Puentes (una joya que pasó un poco en segundo plano) y ese Mistic River. Pero bueno, es un matiz. Eastwood es enorme, sí, como dices una leyenda viva.
Saludos.
Debo de ponerme a rebuscar esa colección de Cátedra que ANRO señala como un regalo para cinéfilos. Estuenda esta entrada de uno de mis últimos personajes favoritos de la historia del cine.
ResponderEliminarMe alegro que os guste. Clint Eastwood es uno de mis favoritos, tanto en su faceta de actor como de director.
ResponderEliminarNo lo he leído, yo tengo otro de la misma editorial, de la colección Signo e Imagen/Cineastas. El autor es un italiano: Alberto Pezzoita, y el libro no esta nada mal.
ResponderEliminarSaludos, Ariodante, y gracias de nuevo por colaborar.
Este año me leí la biografía escrita por Patrick McGilligan, que repasa su filmografía, por supuesto, pero que sobre todo destaca la parte womanizer y tacaña del ídolo. Tacaño en dinero y parco en palabras.
ResponderEliminarEn la cresta de la ola hasta el fin, como bien dices, el último clásico vivo. Apunto otra que me parece obra maestra: "Cartas desde Iwojima". Y a la espera de "Hoover" que al parecer va a ser... ¿¡Di Caprio!?
Saludos.
Clint Eastwood es un tipo excepcional. Y desde luego casi todo lo que hace por no decir todo, lo hace bien. Un clásico ya. Sin Perdón ¡ soberbio western! y Los puentes de Madison tan distinta ¡ maravillosa ! con esa Meryl..Mistic Cartas de Iwo..
ResponderEliminarGran Torino me encantó también..:-))
Junto a la excelente "Gran Torino", la mediocre "El intercambio". Ese es, para mí, en resumen, Clint Eastwood.
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